Siguiendo con su intención de ser el vigilante de las conciencias de los gobernantes, y tras haber dedicado previamente su estudio a las obligaciones de los Reyes, el Consejo de Indias y los Virreyes (Títulos I-III, año 2001), y las de los Oidores y Oficiales Reales de Indias (Títulos IV y V, también en esta colección, año 2003), Avendaño se centra en estos cuatro Títulos de su Thesaurus Indicus (Amberes, 1668) en los deberes de los Corregidores, Encomenderos y Cabildantes. Con ello pretende continuar expresando su agradecimiento a las Indias, de las cuales expresa: «no puedo menos de reconocerme por muchos títulos deudor de ellas». Y continuará asimismo manifestando su rígida censura a los abusos de sus gobernantes.