A Nina da Lua le diagnosticaron un sarcoma de Ewing en la cadera cuando tenía 31 años. Poco después de conocer el diagnóstico, su hijo Marc, que por aquél entonces tenía tres años, le susurró una mañana de frío invierno: “mamá, Hoy es primavera”. Aquellas tres palabras, que dan título al libro y al documental que Nina realizó junto a Álvaro Sanz, le sirvieron de inspiración para confiar y vivir desde dentro, desde la voz interior, todo su proceso de transformación y curación. Un viaje visceral e introspectivo que la autora comparte en primera persona a través de estas páginas y en el que la naturaleza exterior se afina con la interior hasta ser un mismo despertar. Por ello, “Hoy es primavera –del cáncer a un viaje interior-“ es un canto a la vida: un “sí” a la vulnerabilidad que ésta nos regala y a los frutos que, escondidos, crecen en ella.